TODO ES POSIBLE

Se imaginan la chica que desde el colegio quieres estar con ella; y que ella no te hace ni caso. Pues, así es esta historia. Ella, para mí, una diosa. Siempre en ropa sport, por eso un día me atreví a sugerirle que mucha ropa deportiva pero que no la veía que hiciera mucha deporte. Ahí, me lanzo una de esas miradas que me rompían el corazón. “ Si quieres hacemos una carrera y si ganas salimos a dar una vuelta”. Era mi oportunidad, todos los días al Gimnasio debían dar sus frutos y ella como todas las guapas odiaría sudar.Nada más empezar la carrera, la cosa quedo clara... ¡me harte de verla delante mia! Llegue a la meta exhausto, sudoroso y ella estaba fresca y hermosa como una rosa. Me miraba riéndose, yo solo esperaba que lanzara cuanto antes la flecha de la humillación. Pero dijo: “ Anda ven que te invito a un zumito, te lo mereces”. “ Y ademas lo necesito-conteste- ¿ Puede ser esto el inicio de algo?” Clavo sus ojos en los míos: “ Quién sabe, todo es posible”

NADA ES IMPOSIBLE

Del accidente solo me acuerdo que iba a entrenar, como todos los días y... de nada más. Después el tiempo se paro, la vida se hizo más lenta. La frase que se puso de moda en el personal medico fue: “ Nada es imposible”, nada es imposible... mueve las piernas... nada es imposible... un paso más... nada es imposible...
Así superando obstáculos, dos años y noventa y cinco días.
Con muchísimas ganas volví a entrenar, luchando día a día hasta que hoy ¡ he visto mi nombre en el once titular!
Estoy nervioso, me han dejado solo en el vestuario. Ya están en el campo. Me pongo mis viejas botas que han estado conmigo todo este tiempo. Las calzo y me siento seguro, el tacto es suave. Aprieto los cordones y me da mas confianza.
Subo por el túnel del vestuario, ¡Ya veo el césped! Un peldaño más ¡Los jugadores me han hecho un pasillo! Más arriba veo una pancarta con mi nombre. La gente sé esta poniendo en pie ¡Empiezan a aplaudirme!
He prometido no llorar... pero no voy a cumplir mi promesa.